La decisión del Parlamento Europeo de limitar a 11 céntimos de euro el precio máximo de los mensajes de texto enviados en itinerancia entre países de la UE tiene una consecuencia interesante en el mercado español: si no cambian las tarifas vigentes, a partir de este verano será más barato mandar un SMS cuando los españoles salgan de viaje por la UE que hacerlo mientras estan en casa.